Viernes 11 de
diciembre
Palacio de los Deportes
20:30 horas
Caifanes regresa a la
Ciudad de México para ofrecer un emotivo y poderoso concierto en las instalaciones
del Palacio de Los Deportes. La cita para esta gran noche será el viernes 11 de
diciembre.
La emblemática banda del rock nacional y Latinoamericano,
llegará con sus inmortales clásicos como Mátenme porque me muero, Viento, La
célula que explota, Detrás de ti, Los dioses ocultos, Nubes, No dejes que, Ayer
me dijo un ave , Antes de nos olviden, y mucho más.
Desde su nueva
reunión en abril de 2011, Caifanes ha logrado convocar a más de dos millones de
seguidores.
Su primer concierto
fue el 11 de abril de 1987, Caifanes lo relata así:
“Recordamos el
ambiente que nos rodeaba, un ambiente nuevo en sensaciones y espacios. Aunque todos
ya habíamos participado en “tocadas” (no precisamente conciertos) esa tocada
sería diferente. Había cierto misterio y asombro, algo muy poderoso.
Sabo llegó un día a
mi casa, relata Saúl, a decirme que ya teníamos una tocada. Nuestra primera tocada sería en Rockotitlán.
De ahí mismo, le marcamos a Diego. Nuestras eternas compañeras de lucha ya
estaban listas “Mátenme porque me muero”, “Será por eso”, “Amanece”, “Cuéntame
tu vida”, prácticamente todo el primer disco ya estaba vivo, aunque no estaba
grabado todavía. Con canciones dirigidas y hechas nuestras, nos subimos por
primera vez ese 11 de abril de 1987 al pequeñito pero inmaculado escenario de
Rockotitlán.
Todavía recordamos
nuestros trajes negros, las cabezas despeinadas y abultadas, delgados como espíritus
tocábamos ésta música que nos ha dado un espacio en el tiempo. Los teclados
anunciaban una misa sin santos y el bajo gritaba cada vez que la batería
golpeaba el recinto con su fuerza. La guitarra lucía su propia intimidad
sónica, sin virtuosismos ni protagonismos, mantenía esa línea fina y delgada donde
los colores se vuelven acordes y sonidos. Las letras marcaron un tatuaje entre
los presentes logrando así el aullido de la raza.
Coreando las
canciones que en ese momento estaban naciendo entre los aliados. El aullido
sonaba así…! Mááátenme porque me mueroooo….! Te estoooy miraaaaandoooo…!!!!
Cuéééntame tu vidaaaa…!!, cuéntameeelaaaa todaaaa, dime si estoy vivo si
todavía respiro”.
Así, en ese
escenario, el rock mexicano dio luz a una banda llamada Caifanes. Una banda que
va más allá de los lugares comunes o los estereotipos. Una banda que se aleja
del protagonismo y busca simplemente su identidad; su propio espacio en el
tiempo.
“Hoy seguimos
viviendo. Seguimos respirando ese primer suspiro que ha durado tantos años y
que cada vez que subimos al escenario se manifiesta brutalmente. Hoy sigues ahí
raza como el primer día, como el último.
La evolución y los cambios siempre han sido parte de su
historia, pero las constantes nunca han cambiado: la música y la entrañable
magia que varias generaciones comparten y llevan tatuadas en el corazón.
Caifanes extiende y
contagia estas renovadas fuerzas, pasión y entrega, dentro y fuera del
escenario; canción a canción, concierto a concierto, en comunión con su
público, tal como lo han mencionado en recientes declaraciones:
“Cuando va Caifanes a
tocar a alguna ciudad, el espectáculo más grande en los conciertos es el
público, la raza. Creo que Caifanes es un pretexto para reunirnos, cantar y
generar esa energía que sólo ahí podemos sentir.”
Sin duda, su legado
musical se ha esparcido por todos los rincones, hoy en día no hay grupo,
solista o proyecto nuevo, que no haya sido influenciado por la música de
Caifanes.
Un gran ritual, una
gran comunión, una gran noche se vivirá el próximo viernes 11 de diciembre en
el Palacio de los Deportes.